<< All Audio

Al darnos a su Hijo, Dios no podía darnos nada más. Y Él nos lo da todo. Dios nos conceda este tiempo de adviento para que cambiemos. Esfuérzate para que sea un tiempo santo. No vivas el adviento como los demás. ¡Vívelo con fe! Contempla el Sagrado Corazón que ha amado tanto y que se ha entregado por completo y no ha escatimado nada. ¿Cómo respondo? Conforma tu voluntad a la de Cristo. Deja que Cristo reine sobre ti. No desperdicies esta temporada llena de gracia. O Dios, une mi corazón al Tuyo y mi voluntad a la Tuya.